DOS TRASCORDADOS (1)


Anduvimos trocados por la tierra,
él por las costas, yo por las llanuras,
él dispersado entre materias ciegas,
yo desvariando nombre que era el suyo,
zarandeados del agua y del fuego
y mordidos de la loba y la... (2)
y sin comer y beber alimentos,
solo mordiendo por granada el pecho.

Nos cruzamos en noche de ventisca;
en las mismas posadas estuvimos,
ciegos dormidos y ciegos despiertos.
De la vigilia ya desconfiamos; (3)
si es que estamos soñando, que soñemos;
hasta que nos convenza nuestro sueño.

Está el pasado cayendo en pedazos
como el mendigo de las ropas bufas...
no lloramos viéndonos desnudos,
no tiritamos de tanto despojo;
si tanto falta es que nada tuvimos.

Todos partieron y estamos quedados
sobre una ruta que sigue y nos deja.
Y no lloramos cuando desprendimos
sus pobres manos de su ronda muerta. (4)
Si todo ha sido sueño y desvaríos
que me madure en el sueño la muerte. (5)

 

Notas

(1) Gabriela anota al inicio del poema: "Dos trascordados" y aprueba el texto.

(2) "Y mordidos de la loba y la ", "husmeados de la loba y la...". Verso inconcluso.

(3) Anota Doris Dana: "Dice Gabriela añadir".

(4) "sus pobres manos de su ronda muerta", "(de su Santa ronda), (de su vieja ronda)".

(5) Anota Doris Dana: "Dice Gabriela completarla".