NIÑO
CHIQUITO
A
Fernanda de Castro.
Absurdo
de la noche,
burlador mío,
si-es no-es de este mundo,
niño dormido.
Aliento
angosto y ancho
que oigo y no miro,
almeja de la noche
que llamo hijo.
Filo
de lindo vuelo,
filo de silbo,
filo de larga estrella,
niño dormido.
A
cada hora que duermes,
más ligerito.
Pasada medianoche,
ya apenas niño.
Espesa
losa, vigas
pesadas, lino
áspero, canto duro,
sobre mi hijo.
Aire
insensato, estrellas
hirvientes, río
terco, porfiado búho,
sobre mi hijo.
En
la noche tan grande,
tan poco niño,
tan poca prueba y seña,
tan poco signo.
Vergüenza
tánta noche
y tánto río,
y "tánta madre tuya",*
niño dormido...
Achicarse
la Tierra
con sus caminos,
aguzarse la esfera
tocando un niño.
¡Mudársete
la noche
en lo divino,
yo en urna de tu sueño,
hijo dormido!
Nota
*Expresión
popular mexicana.
|